Michael Jordan, nacido en Nueva York, se hizo como jugador en la Universidad de North Carolina, y pego el salto a la NBA de mano de los Chicagos Bulls, equipo en el que jugaría durante toda su carrera profesional, ganando allí seis anillos, promediando 30.1 puntos por partido y ganando en muchas ocasiones el galardón de máximo anotador o el MVP.
A pesar de medir 1.98, su salto era increiblemente espectacular. Jordan era my rápido, muy ágil, muy listo, muy buen competidor, era el que mejor atacaba y era el que mejor defendía, jugaba en equipo cuando había que hacerlo o se la tiraba en caso contrario, y siempre optaba por la mejor opción. Se podría decir que es el mejor deportista de todos los tiempos.
Sus duelos fueron contra muchos y en muchas ocasiones, todos se querían batir contra el mejor. Desde Magic Johnson a Larry Bird, pasando por los Detroit Pistons de Charles Barkley o los Utah de Malone y Stockton. Y todo ellos admitieron sin duda alguna, que el mejor entre los mejores era él.
Jordan decidió anunciar su segundo retiro de la NBA el 13 de enero de 1999, en una conferencia de prensa realizada en el United Center. Pero el 25 de septiembre de 2000, Jordan anunciaba que volvía a jugar en los Washington Wizards. Pasadas dos temporadas en este equipo, el jugador decidió retirarse para siempre a los 40 años.